En EL ODIANTE, la nueva del director preferido del desaparecido Papa Juan Pablo Segundo, ese mismo Papa que también tenía entre sus interpretes preferidos a Diego Torres y su “Color Esperanza”.
El tigre y la nieve (La tigre e la neve – Italia – 2005 – Roberto Benigni)
Después del fracaso con Pinocho, Benigni vuelve a la formula de La vida es bella. La operación es similar, el actor narigón esta enamorado de un personaje femenino interpretado por la misma Nicoletta Braschi y desde el comienzo de la película hace de todo para conquistarla, hasta que en el medio... la tragedia irrumpe para separarlos. Claro que esta vez la tragedia no es la invasión del nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, sino la reciente Guerra de Irak. Y si... la maniobra apesta tanto como se pueden imaginar, por que se nota falsa y desgraciada. Encima, en la primera parte de El tigre y la nieve no hay como en La vida es bella un intento por recuperar cierto humor slapstick y chaplinesco, que era agradable y muy cinematográfico, sino que ahora Benigni tiene unos cuantos años más y esta viejo, decadente y patético. Ya no tiene sentido del humor físico y no hay un chiste en la película con el que el tipo pueda hacer reír, ¡además el muy hijo de puta se la pasa en pijamas alrededor de un tercio del metraje! Pero de cualquier manera, lo peor sigue siendo la banalización de la tragedia histórica. Y acá también, hay guerra en la película y se evita lo terrible, siempre mostrando como hay que ponerle la otra mejilla a los asuntos. Bien en consonancia con el discurso del cristianismo y bien funcional a los grupos más poderosos y explotadores del planeta. Aclaro, el dos de puntaje es por el final, que si bien es ultra kitsch, tiene una pizquita de nobleza. Calificación: 2
El tigre y la nieve (La tigre e la neve – Italia – 2005 – Roberto Benigni)
Después del fracaso con Pinocho, Benigni vuelve a la formula de La vida es bella. La operación es similar, el actor narigón esta enamorado de un personaje femenino interpretado por la misma Nicoletta Braschi y desde el comienzo de la película hace de todo para conquistarla, hasta que en el medio... la tragedia irrumpe para separarlos. Claro que esta vez la tragedia no es la invasión del nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, sino la reciente Guerra de Irak. Y si... la maniobra apesta tanto como se pueden imaginar, por que se nota falsa y desgraciada. Encima, en la primera parte de El tigre y la nieve no hay como en La vida es bella un intento por recuperar cierto humor slapstick y chaplinesco, que era agradable y muy cinematográfico, sino que ahora Benigni tiene unos cuantos años más y esta viejo, decadente y patético. Ya no tiene sentido del humor físico y no hay un chiste en la película con el que el tipo pueda hacer reír, ¡además el muy hijo de puta se la pasa en pijamas alrededor de un tercio del metraje! Pero de cualquier manera, lo peor sigue siendo la banalización de la tragedia histórica. Y acá también, hay guerra en la película y se evita lo terrible, siempre mostrando como hay que ponerle la otra mejilla a los asuntos. Bien en consonancia con el discurso del cristianismo y bien funcional a los grupos más poderosos y explotadores del planeta. Aclaro, el dos de puntaje es por el final, que si bien es ultra kitsch, tiene una pizquita de nobleza. Calificación: 2
No comments:
Post a Comment