Bourne, el ultimátum

Confirmado: Tarantino esta hecho un pelotudo. Pude ver en DVD zona 1 la edición extendida de Death Proof (la misma que se presento en el último Festival de Cannes) y es todo lo que me temía: superficial, canchera, pajera, aburrida. Dicen que la buena es la de Robert Rodríguez. ¡Esperemos que así sea! Ahora una de un director que no esta nada pelotudo, el ingles pastoverde.

Bourne, el ultimátum (The Bourne ultimátum – EU – 2007 – Paul Greengrass)

El ultimátum de Bourne es la continuación de La supremacia de Bourne. Sí, esto ya lo saben, pero entiéndase continuación en un sentido más amplio, más completo. Me explico: esta tercera parte parece pensada para verla a los dos minutos de terminada la segunda, engachadita y haciendo apenas una pausa para ir hasta una heladera a buscar otra birra. Ya que empieza ahí, a puro climax, sin perder mucho tiempo en explicar el conflicto ni presentar a sus personajes. Aprovechando, y con todo, el envión de su antecesora. Haciendo todo lo que una continuación de una película de acción tendría que hacer. Greengrass, desde el primer momento, nos mete de lleno en la trifulca y no para nunca más, siempre con su característico estilo de docudrama, siempre con su cámara enfermísima de Síndrome de Parkinson. Que es entretenida, es entretenida. Que esta bien filmada, esta bien filmada. Que tiene buenas escenas de acción, tiene buenas escenas de acción (la mejor: la de Marruecos, solo por que le saca el jugo a la arquitectura de la locación; las de Inglaterra o Nueva York están buenas pero podrían ocurrir de la misma manera en cualquier otro lugar). Pero para mi hay un problemita con El ultimátum de Bourne, y ese problemita es Bourne mismo. Este héroe por buscar ser más realista que otros dentro su género, termina por sacrificar una vez más romanticismo, carisma, emoción. Además este personaje de Matt Damon siempre esta yendo en la misma dirección, implacable y parcamente. Y por más que varíen en calidad -esta tercera parte seguro es la mejor de la trilogía-, con todas sus películas me pasa lo mismo: no puedo dejarlas de ver con cierto distanciamiento. Bourne se la re banca, pero que quieren que les diga, es un tipo que no me llega. Así que buen entretenimiento, pero en fin, epidérmico y desangelado a la vez. Prefiero un John McClane. Calificación: 6